La industria de la segunda transformación de la madera lleva seis años en caída libre que han borrado del mapa a un buen número de empresas que comenzaron a brotar con el boom de la construcción. Con el estallido de la burbuja inmobiliaria solo algunas de las más potentes compañías han podido resistir y con dificultades, como el caso de Muebles Hermida, que presentó un ERE ya en 2011 para recortar a la mitad su plantilla.
Cerca de tocar fondo, en 2013 la facturación de la industria de la carpintería y el mueble se situó en los 369 millones, según los datos que recopila la patronal Confemadera. Esta cifra marca el sexto año consecutivo de caída en las ventas, dejando los ingresos de 774 millones obtenidos por el sector en 2007 recortados a más de la mitad.
Los refugios
El peso de la segunda transformación de la madera es todavía notable en el conjunto del Estado, donde el negocio gallego representa cerca del 7,5% de la facturación. Pero el declive de los años de la crisis resulta evidente. La buena noticia es que en los últimos tres años se ha ido amortiguando la caída. Las ventas se redujeron en 54 millones en 2011, en 35 millones en 2012 y en 27 millones en 2013.
Los trabajos para centros comerciales y establecimientos sirvieron de refugio al sector ante el parón constructivo y el insuficiente dinamismo de la exportación. Mientras, las tiendas de las multinacionales del sector textil, Inditex, Textil Lonia o Adolfo Domínguez, han mantenido a flote a un pequeño número de empresas.
Cerca de tocar fondo, en 2013 la facturación de la industria de la carpintería y el mueble se situó en los 369 millones, según los datos que recopila la patronal Confemadera. Esta cifra marca el sexto año consecutivo de caída en las ventas, dejando los ingresos de 774 millones obtenidos por el sector en 2007 recortados a más de la mitad.
Los refugios
El peso de la segunda transformación de la madera es todavía notable en el conjunto del Estado, donde el negocio gallego representa cerca del 7,5% de la facturación. Pero el declive de los años de la crisis resulta evidente. La buena noticia es que en los últimos tres años se ha ido amortiguando la caída. Las ventas se redujeron en 54 millones en 2011, en 35 millones en 2012 y en 27 millones en 2013.
Los trabajos para centros comerciales y establecimientos sirvieron de refugio al sector ante el parón constructivo y el insuficiente dinamismo de la exportación. Mientras, las tiendas de las multinacionales del sector textil, Inditex, Textil Lonia o Adolfo Domínguez, han mantenido a flote a un pequeño número de empresas.